Nuestros políticos, los pobres, llevan casi tres meses de estrés después de la campaña electoral y las infructuosas negociaciones para formar gobierno. Para ayudarles a pasar el trago, ofrezco aquí una cartilla de principios elementales que conducen irremisiblemente a la formación de un gobierno por el bien de España.
Los principios elementales son los siguientes:
- La primera consideración es, naturalmente, el bien de España; todos los demás principios ceden ante este.
- Sorprendentemente, el bien de España coincide con la voluntad de los españoles, con lo que quieren los españoles.
- Lo que quieren los españoles se resume en dos palabras: catarsis y estabilidad.
- Estabilidad significa aprovechar la mejora económica y abstenerse de experimentos sin recorrido en la UE
- Catarsis significa: «ya está bien, basta de políticos ladrones de uno u otro signo».
De estos principios se sigue la formación de un gobierno de gran coalición con mayoría suficiente para:
- acordar una reforma de la constitución y de las leyes que rigen el funcionamiento de los partidos políticos
- pactar una legislatura corta (dos años) que permita culminar dicha reforma y renovar de los pies a la cabeza los partidos
- desinflar a los partidos populistas, sometidos al desgaste del gobierno (municipal)
- Frenar a los separatistas.
Para alcanzar este objetivo nacional, lo de menos es quién va a ser presidente de gobierno o qué partido prevalecerá. Si España se va al traste, y se corre el riesgo, todos serán igualmente responsables. Ante Dios y ante la Historia.
Admito que el esquema es simplista, pero la política al final siempre lo es. ¿A qué estamos esperando?